Birding en Els Ports

La comarca de Els Ports, verdadero paraíso natural, ofrece una gran variedad de paisajes y hábitats que dan lugar a una enorme biodiversidad de especies vegetales y animales. La jornada que pasamos recorriéndola con Javier y Javi, resultó excelente ya que pudimos observar una gran cantidad y variedad de aves y, sobre todo, de rapaces.

Comenzamos la jornada en Ares del Maestrat donde tuvimos la fortuna de compartir el café de la mañana con Ramón Prades y Ana Llopis, amigos y agentes medioambientales de la zona, en el Hotel d’Ares. Con ellos estuvimos charlando de las posibles especies que encontraríamos por la zona y de como el calor de estos días estaba dificultando las observaciones.

Aunque el objetivo principal de la jornada era la observación de rapaces, el reciente descubrimiento de al menos 2 parejas de Alcaudón dorsirrojo en la comarca hacía casi obligatoria una parada en la zona para intentar localizarlos.
No fue difícil encontrar una de las familias (la pareja y 3 crías) en su territorio aunque guardando las distancias para no molestar.

Junto a ellos otras muchas especies de paseriformes (Gorrión chillón, Tarabilla común, Collalba gris, Pardillo común, Alondra común, Papamoscas gris, Escribano soteño,…), los primeros Buitres leonados, alguna Corneja negra y, aunque sin dejarse ver, el insistente canto de una Codorniz.

El siguiente objetivo era acercarnos a las buitreras del Paraje Natural de la Rambla de Celumbres, con los impresionantes cortados de Roca Roja y Roca Parda.

De camino entre Villafranca del Cid y Portell de Morella, ya pudimos observar las primeras rapaces: Busardo ratonero, Aguililla calzada y varios ejemplares de Águila culebrera además de un Buitre posado en una torre eléctrica que no se inmutó con nuestra presencia. 

Pero fue en los enormes cortados de la Rambla donde anidan numerosas especies de aves rupícolas donde pudimos observar los primeros Alimoches volando junto a Buitres leonados.

Compartiendo el espacio sobre nuestras cabezas con buitres, Vencejos comunes y un solitario Cernícalo vulgar, pudimos disfrutar del vuelo de varios ejemplares del espectacular Vencejo real.

Aunque el objetivo estaba cumplido, después de comer seguimos buscando mejores observaciones de Alimoche. Seguimos aguas abajo la rambla de Celumbres que pasa a llamarse río Caldes antes de unirse al de Cantavieja y formar el río Bergantes por los términos municipales de Cinctorres, Forcall y Sorita.

Estos tramos fluviales, bien conservados acogen incluso algunas parejas de Chorlitejo chico y es común la presencia de AbejarucosOropéndolas, Abubillas y muchas especies distintas de paseriformes.

Tuvimos suerte con el escaso «buitre sabio» y pudimos hacerle una buena serie de fotos justo cuando apareció también por allí un solitario Milano negro, especie muy escasa en la zona aunque con constancia de reproducción algunos años.

Una parada en el río Bergantes, pasado ya el preciso enclave de la Balma, para buscar evidencias de la presencia de nutria en este río nos deparo una bonita sorpresa: un grupo de cabras montesas que se acerco a beber al río y que, sin percatarse de nuestra presencia, nos permitió realizarles algunas fotos.

Tras este momento retomamos el camino de vuelta a Ares del Maestre por la Rambla de la Canà. El siguiente objetivo era intentar localizar una nueva especie de rapaz para terminar la jornada: el Aguilucho cenizo que tiene en la comarca de el Alt Maestrat una de sus mejores zonas de cría en la Comunidad Valenciana. Y no se hicieron de rogar pues antes de llegar a Catí, pudimos observar varios ejemplares adultos y dos jóvenes del año, lo que indica el éxito reproductor de algunas de las parejas que nidifican en la zona.

 

La última parada, ya fuera del itinerario previsto, la realizamos de vuelta a Valencia en las inmediaciones de La Pobla Tornesa.

Allí es posible localizar a los Halcones de Eleonora  en esta época del año, capturando insectos en vuelo en los pinares de la zona norte del Parque Natural del Desert de les Palmes.

Aunque no tuvimos éxito, al día siguiente sí pudimos observarlos unos kilómetros más al norte junto a la localidad de la Vall d’Alba.