Es verano en el Parque Natural de la Albufera de Valencia.
Los arrozales que rodean el lago permanecen inundados y teñidos completamente del verde de las matas de arroz que han alcanzado ya su talla máxima y en breve dejara asomar sus espigas.
Se escucha el agua circular por lo mismos canales, acequias y campos donde decenas de especies distintas de aves se afanan en sacar adelante sus nidadas. Aquí y allá son visibles un sinfín de volantones y/o jóvenes garzas, gaviotas, charranes, pagazas, cigüeñuelas, azulones, gallinetas, y un largo etcétera, acompañando a los adultos o ya emancipados enfrenándose a la vida.
En un recorrido de unas 6 horas por los arrozales (y algunas zonas de cultivos de huerta y frutales) de la parte norte del Parque Natural comprendida entre la pedania valenciana de Pinedo y los términos de Alfafar, Catarroja y Silla fuimos capaces de identificar 40 especies distintas algunas de ellas interesantes (ver lista)
En algunas especies se aprecia ya una activa muda que en algunas especies como la Gaviota cabecinegra origina, de forma transitoria, patrones de plumaje que pueden llegar a confundir a un observador poco avezado.
Mientras, van apareciendo ya, aunque con cuentagotas, algunas especies procedentes de tierras más septentrionales que han iniciado su regreso a los cuarteles de invernada el el sur de Europa o en África (ver citas en www.birdingalbufera.es).
Un buen momento pues para acercarse a conocer este humedal, incluido en la Red Natura 2000 y en la lista Ramsar, el tercero en extensión de la Península ibérica.